En nuestro programa del jueves 20 de agosto rescatamos de La Bóveda y el olvido el único álbum de Flavio Calaveralma Trío, efímera formación dirigida por Flavio Cianciarulo que en 2003 editó El Marplatense.
En él, Flavio se pone realmente autobiográfico y conmovedor, además de continuar la experimentación iniciada en la última época de Los Fabulosos Cadillacs -sobre todo con Fabulosos Calavera y con un álbum que fue Disco Del Día aquí alguna vez, La Marcha Del Golazo Solitario- pero con especial raigambre en ritmos rioplatenses como el candombe y la murga y géneros folclóricos (zambas, chacareras) entremezclados inteligentemente con estilos con los cuales Cianciarulo se hallaba en pleno romance entonces, especialmente el jazz y, claro, el rock.
Para ello, Flavio convoca al multiinstrumentista Gustavo Liamgot y al baterista José Nalé, hombres de extenso currículum; Liamgot en el jazz y Nalé en el folclore; además de algún que otro experimento rockero. Mientras, él se hace cargo fundamentalmente de sus instrumentos típicos (bajo, contrabajo y guitarras, especialmente acústicas) y escribe variadas y hermosas letras que también reflejan romances en plena ebullición, sobre todo con Osvaldo Pugliese (a quien le escribe "San Pugliese", que escuchamos en nuestro #10) y Eduardo Mateo (la canción que da título al álbum es claramente deudora del uruguayo que disfrutamos aquí con Mateo Solo Bien Se Lame como Disco Del Mes).
Estas dedicatorias se entremezclan con más referencias biográficas de Flavio como la que corona "Panamericana" (canción que cerró nuestro informe) y exquisitos instrumentales -"La Machista", "Blues For Joe", canción que escuchamos- todas ellas canciones interpretadas con frescura y honestidad, en un álbum candoroso y sensible como Cianciarulo jamás volvería a ofrecer a lo largo del resto de su carrera.
Quizás por eso es que se tuvo que hundir en el olvido de La Bóveda. Para que podamos rescatarlo por haber sido un álbum incomprendido pero absolutamente maravilloso.
Para ello, Flavio convoca al multiinstrumentista Gustavo Liamgot y al baterista José Nalé, hombres de extenso currículum; Liamgot en el jazz y Nalé en el folclore; además de algún que otro experimento rockero. Mientras, él se hace cargo fundamentalmente de sus instrumentos típicos (bajo, contrabajo y guitarras, especialmente acústicas) y escribe variadas y hermosas letras que también reflejan romances en plena ebullición, sobre todo con Osvaldo Pugliese (a quien le escribe "San Pugliese", que escuchamos en nuestro #10) y Eduardo Mateo (la canción que da título al álbum es claramente deudora del uruguayo que disfrutamos aquí con Mateo Solo Bien Se Lame como Disco Del Mes).
Estas dedicatorias se entremezclan con más referencias biográficas de Flavio como la que corona "Panamericana" (canción que cerró nuestro informe) y exquisitos instrumentales -"La Machista", "Blues For Joe", canción que escuchamos- todas ellas canciones interpretadas con frescura y honestidad, en un álbum candoroso y sensible como Cianciarulo jamás volvería a ofrecer a lo largo del resto de su carrera.
Quizás por eso es que se tuvo que hundir en el olvido de La Bóveda. Para que podamos rescatarlo por haber sido un álbum incomprendido pero absolutamente maravilloso.
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